En épocas donde la hegemonía del formato serie y la gran mayoría del mercado audiovisual superexplota el aspecto narrativo haciendo uso y abuso del ‘cliffhanger’ para generar golpes de efecto que vuelvan al espectador “adicto”, el éxito de la miniserie de HBO ‘ Chernóbil’ parece tener como mérito principal el haber despertado un enorme interés y haberse ganado una audiencia masiva contando una historia tan real como conocida como es la del accidente nuclear de Chernóbil [1] . Parte del éxito se deba seguramente a la excelente realización con la que cuenta la serie en términos de guion, actuación, aspectos técnicos, etc. Pero otra parte seguramente se deba a que estamos ante una serie con un fuerte contenido político que se mete de lleno en el debate ideológico que se acrecienta día a día entre las generaciones jóvenes de todo el mundo ante la falta de perspectivas que ofrece el capitalismo: ¿hay otra alternativa al capitalismo? La serie de HBO intenta responder clara...
"Porque en la batalla filosófica no basta tomar posición contra el adversario, sino que es preciso determinar también la apuesta de la lucha y disputarla con sus propias armas adaptando las formas de su intervención a la naturaleza precisa -históricamente variable- de esta apuesta". Dominique Lecourt.